Derechos y obligaciones de un aval
diciembre 25, 2025
Cuando se habla de comprar una vivienda o de acceder a financiación, el aval es una figura que aparece más a menudo de lo que parece. Aun así, no siempre queda claro qué implica asumir ese papel ni cuáles son exactamente los derechos y obligaciones del aval. Si te han pedido que seas avalista o te estás planteando esta posibilidad, es clave que tengas toda la información antes de tomar una decisión.
En este post te explicamos, de forma clara y sin tecnicismos innecesarios, qué significa ser avalista, qué responsabilidades asumes y qué derechos te protegen.
¿Qué es un avalista y qué papel tiene?
Antes de entrar en materia, conviene aclarar qué es un avalista. Un avalista es la persona que responde ante una deuda ajena si el titular principal no cumple con sus obligaciones de pago. En el ámbito inmobiliario, esto es especialmente habitual en hipotecas, cuando el banco exige una garantía adicional.
El avalista no es el propietario de la vivienda ni el titular del préstamo, pero asume un compromiso legal muy relevante. En caso de impago, la entidad financiera puede reclamar directamente al avalista, incluso antes de agotar las vías contra el deudor principal, si así se ha pactado en el contrato.
Principales obligaciones del aval
Hablar de los derechos y obligaciones del aval implica empezar por la parte menos amable: las responsabilidades. Ser avalista no es un simple trámite, sino un compromiso que puede tener consecuencias patrimoniales importantes.
Responder de la deuda en caso de impago
La principal obligación del avalista es hacerse cargo de la deuda si el titular no paga. Esto puede incluir cuotas impagadas, intereses, comisiones e incluso costas judiciales.
Poner en riesgo el patrimonio personal
Si el aval es personal, el banco puede reclamar bienes presentes y futuros del avalista. En algunos casos, el aval puede ser solidario, lo que permite a la entidad ir directamente contra el avalista sin necesidad de reclamar primero al deudor.
Mantener el aval hasta la extinción de la deuda
Otra obligación habitual es que el aval se mantenga vigente hasta que el préstamo quede totalmente cancelado. No se puede retirar unilateralmente, aunque la situación económica del avalista cambie.
Derechos del avalista que debes conocer
A pesar de las obligaciones, el avalista también tiene derechos que a menudo se desconocen y que pueden marcar una gran diferencia.
Derecho a la información
El avalista tiene derecho a conocer todas las condiciones del préstamo que avala. Esto incluye importes, plazos, tipo de interés y posibles modificaciones contractuales. Firmar sin entender estos puntos es un error frecuente.
Derecho de repetición
Si el avalista acaba pagando la deuda, puede reclamar posteriormente esas cantidades al deudor principal. Este derecho es clave, aunque en la práctica puede resultar difícil hacerlo efectivo si el deudor no tiene solvencia.
Beneficio de excusión (si está pactado)
En algunos contratos, el avalista puede exigir que el banco reclame primero al deudor antes de ir contra él. Esto no siempre se incluye; por tanto, es fundamental revisar bien el contrato.
Diferencia entre avalista y titular del préstamo
Un error habitual es pensar que el avalista tiene el mismo rol que el titular del préstamo. No es así. El avalista no tiene derechos sobre el inmueble ni capacidad de decisión sobre el préstamo, pero sí asume riesgos similares a los del deudor.
Esta asimetría hace que muchas personas acepten ser avalistas por vínculos familiares o personales sin ser del todo conscientes de las implicaciones reales.
¿Qué deberías revisar antes de aceptar ser avalista?
Antes de firmar como avalista, es importante que te detengas a revisar con detalle todas las condiciones del aval. No se trata solo de un trámite, sino de un compromiso que puede afectar directamente a tu situación económica durante años.
Algunos puntos clave que conviene analizar son:
- Si el aval es solidario o está limitado en el tiempo y en el importe
- El importe total de la deuda que estás avalando
- La duración real del aval y en qué momento se extingue
- Las consecuencias en caso de impago
- Si existe la posibilidad de cancelar el aval en el futuro
Entender bien los derechos y obligaciones del aval es imprescindible para evitar problemas futuros. Un aval no es solo un gesto de apoyo, sino una decisión con consecuencias jurídicas y económicas importantes.
En Espígul sabemos que cada operación inmobiliaria tiene matices propios. Por eso, acompañarte con información clara y asesoramiento profesional es clave para que tomes decisiones con seguridad y criterio, tanto si compras, vendes o avalas una vivienda.