Finalizar contrato de alquiler: pasos y opciones disponibles
septiembre 18, 2025

La decisión de finalizar un contrato de alquiler puede surgir por diferentes motivos: cambio de residencia, mejora de las condiciones de vida, finalización del plazo pactado o bien la voluntad del propietario de recuperar la vivienda. Sea cual sea el caso, es importante conocer los pasos y opciones disponibles para evitar problemas legales o económicos.
¿Qué significa la finalización de contrato de alquiler?
La finalización de un contrato de alquiler implica dar por terminada la relación entre propietario e inquilino, ya sea por el cumplimiento del plazo pactado o por otras causas reconocidas por la ley.
En la práctica, esto significa que se deben cumplir unos requisitos concretos: avisar con suficiente antelación, firmar la documentación correspondiente y, en caso necesario, establecer un acuerdo entre ambas partes.
Pasos a seguir para la rescisión del contrato de alquiler
La rescisión del contrato de alquiler requiere seguir un procedimiento formal que asegure que ninguna de las partes quede desprotegida:
- Notificación previa: hay que comunicar la voluntad de finalizar el contrato con un mínimo de 30 días de antelación si es el inquilino quien se marcha, o de 4 meses en caso de que sea el propietario quien quiera poner fin al acuerdo.
- Comunicación por escrito: es recomendable enviar la notificación por burofax o correo certificado para dejar constancia legal.
- Revisión de la vivienda: antes de la entrega de llaves, se comprueba el estado del piso para determinar si deben descontarse posibles desperfectos de la fianza.
- Liquidación de la fianza y otros gastos: la fianza debe devolverse en el plazo legal (normalmente un mes), siempre que no existan daños ni deudas pendientes.
Opciones disponibles según cada caso
Existen diversas maneras de afrontar el final de un contrato:
- Finalización por acuerdo mutuo: las dos partes deciden terminar el contrato antes de tiempo y establecen conjuntamente las condiciones.
- Rescisión por parte del inquilino: el inquilino puede rescindir el contrato después de seis meses, siempre que lo comunique dentro del plazo establecido y cumpla con las obligaciones económicas.
- Rescisión por parte del propietario: en determinados casos, el propietario puede necesitar la vivienda para uso propio o para familiares. Aquí es clave disponer de un modelo de rescisión de contrato de alquiler por parte del propietario, que refleje de forma correcta los motivos y los plazos.
Consejos prácticos antes de cerrar un contrato de alquiler
Antes de poner fin a un contrato, hay pequeños detalles que pueden marcar la diferencia y evitar conflictos. Preparar correctamente la documentación, revisar el estado del piso y comunicarte con claridad son pasos que te ayudarán a cerrar el acuerdo sin sorpresas.
- Revisa la documentación: asegúrate de tener copia del contrato y de todos los recibos de pago al día.
- Prepara la vivienda: deja el piso en las mejores condiciones posibles para facilitar la devolución íntegra de la fianza.
- Comunícate con transparencia: un diálogo abierto con el propietario o el inquilino siempre ayuda a evitar malentendidos.
- Formaliza por escrito: evita acuerdos verbales; la mejor garantía es dejar constancia escrita de la rescisión del contrato de alquiler.
Finalizar un contrato de alquiler con el apoyo de Espígul
Finalizar un contrato puede parecer sencillo, pero un error en los plazos o la documentación puede llevar a conflictos. En Espígul te acompañamos para que el proceso sea ágil y seguro, tanto si eres propietario como si eres inquilino. Nos encargamos de revisar el contrato, preparar los documentos necesarios y guiarte en cada paso para que afrontes la finalización del contrato de alquiler con total tranquilidad.
Si estás pensando en finalizar tu contrato de alquiler, contacta con Espígul y déjate asesorar por profesionales que velan por tus intereses.