Consejos para cerrar tu casa de verano

Una vez acabadas las bonitas y tan esperadas vacaciones de verano, toca volver a casa y dejar el apartamento de la playa o la casita de la montaña. Pero, ¿cómo debes hacerlo para que el año que viene no tengas que preocuparte de nada?

Aunque al final de tus vacaciones en lo último que pienses es en limpiar y ordenar, es importante que lo hagas antes de volver a casa. Limpia la casa, barre y friega los suelos, organiza la cocina y no te olvides de las ventanas (para las bonitas vistas). Es algo que al final de las vacaciones no apetece, pero vale la pena para que la suciedad no se acumule y para no tener que hacerlo cuando empiezas con tantas ganas tus vacaciones del año que viene.

Acuérdate de cerrar la llave del agua, del gas y bajar los plomos para la luz y electricidad. Eso ayuda a que los despistes de última hora no salgan caros o que cualquier problema que pueda surgir durante la temporada que no utilices la casa pueda desaparecer.

Dejar recogidas y aseguradas las cosas del exterior, como sillas, sombrillas o toldos, decoraciones o macetas. El tiempo puede volverse en tu contra con viento y lluvia y dejarte sin tus pertenencias de terraza o jardín.

No dejes cosas de valor en una vivienda que no vas a visitar en mucho tiempo, no sabes lo que puede pasar y mejor que se quede en solo un susto y no se tengan que lamentar daños mayores.

Así que, aunque te pese, ya puedes dejar cerrada tu vivienda de verano durante una larga temporada con la única preocupación de cuando volver a coger vacaciones.